Se busca dueño de mi costilla

Tengo esta idea romántica que no debemos buscar o esperar (cual sea tu caso) la media naranja sino que en algún lugar del mundo está el dueño de nuestra costilla (aclaro que soy casada, pero es más emocionante cuando se trata de romance, escribir en primera persona :P) de ese que Dios de su costillar sacó la costilla de la cual fuiste formada, más que en tu alma gemela creo en ese idóneo que fue predestinado, el que Dios tiene para ti, el que a pesar de tus defectos y sus defectos encaja perfectamente.

Es tan romántico pensar que cada persona que conocemos podría ser el, como dice la canción de Alejandro Sanz “¿y si fuera ella?” awwww, (pero en versión femenina). Siempre se tiene este interrogante, ¿será este?, pero muchas veces no se hace la lucha para averiguarlo hemos creido que el primer paso lo deben dar ellos, y aunque soy de las que creo que ellos nos deben conquistar y los que se deben declarar, también creo que podemos ir arrojando miguitas que le muestren el camino para llegar a nuestro corazón, porque al igual que nosotras queremos ser conquistadas y escuchar que nos aman, ellos también necesitan escuchar que lo están haciendo bien, que lo que hacen está dando fruto.

Tal vez el dueño de tu costilla llegue a ti o tal vez tendrás que llegar a él, igual que lo hizo Rut al acostarse a los pies de Booz.

Así que las jovencitas deberían pensar si son anatómicamente compatibles con quién están saliendo jajajaja.

Me gusta una frase que dice: “hay un tiempo para que sucedan las cosas y otro para hacer que sucedan”.